Cada semana se realizan talleres de fortalecimiento personal con sesiones semiestructuradas que buscan potenciar su autoestima, autoconcepto, identidad, comunicación, resiliencia, etc., velando por sus derechos en un ambiente de respeto, tolerancia y socialización.
En la foto se muestra un trabajo realizado por un niño resaltando sus cualidades, en la otra foto se observa una dinámica de integración como parte de las actividades programadas.
Parte de las actividades es realizar trabajos manuales con material reciclable que en varias ocasiones es llevado por los propios niños, muchos de estos trabajos son entregados luego a sus padres o figuras significativas como parte de la actividad y como forma de estrechar el vínculo familiar. A través de las manualidades se fomenta su creatividad y socialización, los niños(as) aprenden a compartir los materiales que se emplean para cada trabajo con sus compañeros.
El juego siempre está presente dentro de las actividades que se realizan, según estas se realizan dentro o fuera del módulo recreativo; muchos de los juegos programados ayudan a fortalecer la atención, concentración y seguimiento de normas. Con el juego y las dinámicas grupales los niños y niñas socializan y se fortalece el vínculo como grupo.
Cada mes se incide en un derecho y se elabora un cartel junto a los niños y niñas explicando y compartiendo lo que significa cada derecho y por qué es importante en sus vidas, el derecho al juego, a la salud, al buen trato, a la vivienda digna y a la participación son algunos de los que son desarrollados en diferentes meses de la programación.
Todo este conjunto de actividades que se desarrollan son un medio para facilitar la intervención priorizando a los niños y niñas como la población mas vulnerable y destacando la salud mental, el juego y la participación como algunos de los derechos en los que se debe incidir en una etapa post desastre para lograr el bienestar psicosocial de la persona y su integración paulatina al transcurso cotidiano dentro de su comunidad.
En la foto se muestra un trabajo realizado por un niño resaltando sus cualidades, en la otra foto se observa una dinámica de integración como parte de las actividades programadas.
Parte de las actividades es realizar trabajos manuales con material reciclable que en varias ocasiones es llevado por los propios niños, muchos de estos trabajos son entregados luego a sus padres o figuras significativas como parte de la actividad y como forma de estrechar el vínculo familiar. A través de las manualidades se fomenta su creatividad y socialización, los niños(as) aprenden a compartir los materiales que se emplean para cada trabajo con sus compañeros.
El juego siempre está presente dentro de las actividades que se realizan, según estas se realizan dentro o fuera del módulo recreativo; muchos de los juegos programados ayudan a fortalecer la atención, concentración y seguimiento de normas. Con el juego y las dinámicas grupales los niños y niñas socializan y se fortalece el vínculo como grupo.
Cada mes se incide en un derecho y se elabora un cartel junto a los niños y niñas explicando y compartiendo lo que significa cada derecho y por qué es importante en sus vidas, el derecho al juego, a la salud, al buen trato, a la vivienda digna y a la participación son algunos de los que son desarrollados en diferentes meses de la programación.
Todo este conjunto de actividades que se desarrollan son un medio para facilitar la intervención priorizando a los niños y niñas como la población mas vulnerable y destacando la salud mental, el juego y la participación como algunos de los derechos en los que se debe incidir en una etapa post desastre para lograr el bienestar psicosocial de la persona y su integración paulatina al transcurso cotidiano dentro de su comunidad.